La EPA Trabaja Para Mantener Para Siempre Los Químicos Fuera del Agua Potable

Este mes, la Agencia de Protección Ambiental de EE. UU. (EPA) emitió la primera norma nacional sobre agua potable para proteger a las comunidades de la exposición a sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas (PFAS), comúnmente llamadas “sustancias químicas permanentes”. Debido a que el agua potable puede ser una fuente importante de exposición a las PFAS, la EPA emitió esta regla después de revisar una extensa investigación y ciencia sobre cómo las PFAS afectan la salud pública, al tiempo que colabora con los reguladores estatales y el sector del agua para garantizar una implementación efectiva. Se han puesto a disposición fondos para ayudar al sector del agua a analizar y tratar el agua potable pública para detectar contaminación con PFAS.

Muchos PFAS son sustancias químicas que ayudan a que los productos cotidianos sean impermeables, antiadherentes, resistentes a las manchas y más. Tardan muchísimo en deteriorarse, por lo que estas sustancias químicas nocivas se pueden encontrar en el agua, el aire y la tierra. Al reducir la exposición a las PFAS, esta regla final evitará decenas de miles de enfermedades graves, incluidos ciertos cánceres, impactos en el hígado y el corazón en adultos, e impactos inmunológicos y de desarrollo en bebés y niños.